El apoyo de la familia y amigos puede ser muy importante cuando se está intentando bajar de peso. El cambio de los hábitos alimenticios es una tarea difícil y el entorno puede ayudar a cambiar estos hábitos.
Es recomendable hablar con ellos acerca de la decisión que se ha tomado y nunca avergonzarse de ello, ya que querer bajar de peso es un buen objetivo. Es bueno comentarles cuáles son los motivos, deseos y objetivos para que ellos puedan ayudar en lo que sea posible. Si no se habla con ellos, se corre el riesgo de que la meta fracase.
Además, es habitual que si un integrante de la familia intenta cambiar sus hábitos alimenticios, alguno de los demás miembros se contagie, e intente imitarle. En este caso, este aspecto se puede convertir en una doble satisfacción ya que la decisión tomada habrá sido el motor principal para que otro miembro de la familia cambie. Finalmente, cambiar los hábitos alimenticios al mismo tiempo que otro miembro de la familia, hará que la motivación sea todavía mayor.
foto por bebitoybebita
